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Emprendimiento corporativo en la industria
En un artículo anterior hablé sobre la figura del intraemprendedor. No obstante esta figura es solo una parte dentro de la cultura de empresa de emprendimiento corporativo.
Trabajamos con empresas, pero realmente no nos relacionamos con empresas sino con personas. De igual forma, no son las empresas las que innovan, son las personas. Por tanto, estamos viendo que las personas son el principal activo de las empresas. Entonces, si las personas son el principal activo de las empresas, ¿por qué no se les valora adecuadamente?
Uno de los factores que influyen a la hora de aprovechar el valor de los empleados es facilitar que puedan aportar propuestas a la empresa. Esas propuestas pueden ser de cualquier tipo: innovadoras, de mejora de clima, de mejora de resultados, de ahorro, nuevos proyectos,… Propuestas en las que el empleado demuestra su iniciativa, aporta su talento y compromiso a la empresa.
Las empresas con mayor nivel de compromiso presentan un 9% más de incremento en su cuenta de resultados
La innovación hace que las empresas sigan creciendo, ofreciendo nuevos productos y siendo más competitivas. Porque las empresas necesitan reinventarse, generar nuevas ideas y desarrollar nuevas líneas de negocio y, sobre todo, aprender e innovar.
En este sentido las personas comprometidas y emprendedoras son las únicas capaces de llevar a cabo proyectos innovadores con éxito, generar conocimiento, resolver problemas y además disfrutar con ello.
¿En qué consiste el emprendimiento corporativo?
Fomentar una cultura de emprendimiento corporativo en el seno de una empresa es una buena manera de generar innovación. Pero para que todo esto llegue a buen puerto, es necesario crear una cultura empresarial que favorezca la aportación de ideas por parte de los empleados.
En eso consiste el emprendimiento corporativo, en crear los procesos que faciliten que el empleado sienta que puede aportar ideas, que se valorarán y que podrán ser tenidas en cuenta e implementadas.
Es posible que un empresario pueda preguntarse si, desde dentro de la misma empresa, sus empleados podrían ofrecerle esa innovación que busca. La respuesta es sí, desde el Emprendimiento Corporativo, un nuevo concepto que está despertando dentro de las organizaciones, y en el que destaca una figura, la del intraemprendedor.
El intraemprendedor es una persona con carácter emprendedor, que trabaja en el seno de una organización, de la cual no es dueño, desarrollando sus capacidades y su talento para generar nuevos proyectos (nuevas ideas de productos, servicios, negocios, líneas de trabajo,…). Eso sí, debe de contar con el respaldo y el apoyo de la Dirección y de la estructura de la que dispone la empresa.
¿Por qué no todas las empresas favorecen la figura del Intraemprendedor?
Emprender, aunque sea dentro de una empresa, implica equivocarse, fallar, errar. Son palabras que asustan a la mayoría de las empresas, que prefieren quedarse como están y no correr riesgos.
Pero vivimos en una época de cambios y de incertidumbre, lo que valía hace unos años, ya no vale ahora. Esto quiere decir que o aprendemos o no podremos adaptarnos a los nuevos tiempos, y aprender tiene sus riesgos.
Solo las empresas con claro interés por la adaptación al cambio, por el aprendizaje y por la innovación están dispuestas a asumir el riesgo a equivocarse. La capacidad de dar la vuelta a los errores, aprender de ellos y obtener beneficios está solo al alcance de intraemprendedores y organizaciones con la capacidad suficiente para permitir errores y animar a inventar, arriesgar e innovar.
Si una empresa quiere innovar es aconsejable que fomente una cultura de emprendimiento corporativo y que busque al intraemprendedor que hay dentro de su organización, o animar a los que tengan el perfil para serlo. Como he dicho antes, no podemos olvidar que emprender conlleva riesgo al fracaso, pero incluso del fracaso se pueden obtener beneficios, y sin duda, mucho aprendizaje.
El desarrollo de nuevos proyectos implica talento, determinación, pasión, y unas cuantas capacidades más que comparten emprendedores e intraemprendedores.
Ejemplos de innovación en empresa
Veamos ahora un par de ejemplos de productos creados por innovación. Uno creado a partir de un producto fallido pero planteando la posibilidad de utilizarlo para otra aplicación diferente y otro creado para dar solución a un problema existente.
Post-it
Este producto fué creado por Art Fry, un químico de la compañía 3M. En 1968, su compañero Spencer Silver había ideado un adhesivo con acrílico, que sin embargo fue desechado por su “escaso poder de sujeción”.
No obstante, Fry intuyó que, lo que en principio había parecido un defecto en el invento de Silver, podría resultar útil para fijar papeles de manera permanente sin dañar las superficies donde fuesen adheridos.
Después de un año y medio de desarrollo, se obtuvo el diseño final del producto: las notas Post-it. Se probaron en las oficinas de 3M y un 90% de las personas quedaron satisfechas con el nuevo producto, por lo que se inició su comercialización.
Tipex
Este otro producto surgió en Estados Unidos gracias a una secretaria llamada Bette Nesmith Graham. Esta, al ver la cantidad de hojas que se tiraban con las nuevas máquinas de escribir, puso en práctica una solución similar a la que ya utilizaban los pintores. Colocó un poco de pintura blanca en una botellita de esmalte para las uñas, denominando a esta solución ‘Mistake out’.
Muy pronto otras secretarias se fijaron en la solución y comenzaron a pedir dichas botellitas. Sus amigos y uno de los proveedores de la oficina la impulsaron a comercializar el producto localmente.
Otros ejemplos de proyectos surgidos del intraemprendimiento son:
- Billpoint, el sistema de pago de Ebay que cerró cuando adquirió Paypal en 2002.
- Virgin Atlantic Airways lanzada en 1984 a partir de la empresa de discos Virgin.
- La PlayStation de Sony lanzada en 1994.
- El lenguaje de programación Java de Sun Microsystems lanzado en 1995.
- Adwords de Google lanzado en el año 2000.
En Industria, el componente tecnológico es fundamental. Los avances tecnológicos están a la orden del día, por lo que la implicación de los empleados a la hora de innovar y crear nuevos proyectos, es un factor determinante a la hora de marcar diferencias con la competencia.
Potenciar el compromiso de las personas, poniéndolas en valor, destacando su marca profesional y permitiendo que puedan aportar todo su talento y creatividad al servicio de la empresa, es una de las ventajas que aporta una cultura de emprendimiento. Por tanto, el emprendimiento corporativo en el sector industrial, es una herramienta imprescindible para innovar, diferenciarse y ser competitivos.
¿Cuánto le cuesta a una compañía tener un equipo que sigue haciendo las cosas igual que hace años?… Innovar es una necesidad
Y tú qué opinas:
- ¿Se fomenta en tu empresa el emprendimiento corporativo?
- ¿Existe la figura del intraemprendedor dentro de tu empresa?
- ¿Crees que el emprendimiento corporativo puede aportar valor a tu empresa?
- ¿Te gustaría ser un intraemprendedor?
Te invito a compartir tu opinión y sugerencias en los comentarios.
Angel Partida
Ingeniero Técnico Industrial
Fundador de “Mantenimiento & Mentoring Industrial”
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Intraemprendimiento en el sector industrial
En los últimos tiempos se está hablando cada vez más acerca del intraemprendimiento como una herramienta eficaz para la empresa. Cada vez hay más empresas que dan mayor importancia a la figura del intraemprendedor dentro de su organización. Entonces, ¿es posible incluir esta figura en las empresas del sector industrial?
¿Qué es la figura del intraemprendedor?
En toda empresa deberían existir los siguientes perfiles:
- Directivo
- Técnico
- Comercial
- Emprendedor
Los tres primeros perfiles existen en todas las empresas, sin embargo, no es habitual que el perfil emprendedor esté presente en la empresa. Es posible que pueda existir en empresas en las que los socios fundadores sigan al frente de la empresa y sobreviva ese espíritu inicial que les llevó a crear la empresa.
Un intraemprendedor es aquella persona que posee una serie de características que ayudan al desarrollo de nuevos proyectos dentro de la empresa. El intraemprendedor no tiene porqué ser una persona especialmente creativa o innovadora, pero si que debe tener el suficiente empuje y la visión necesaria para sacar los proyectos adelante. Es el responsable de liderar al equipo que le va a ayudar a generar, desarrollar y testear los nuevos proyectos.
Recientemente, empresas como Indra, Telefónica o 3M, están dando mayor importancia a este concepto, facilitando que los empleados desarrollen parte de su tiempo en proyectos que no tienen que ver con su trabajo habitual. Los métodos que utilizan estas empresas pueden ser diferentes, pero el fin es el mismo, apostar por el talento interno de la empresa.
Para desarrollar el intraemprendimiento es necesario orientar y formar a los empleados, facilitar un método para realizar el proceso y fomentar una cultura dentro de la empresa que favorezca ese impulso para ayudar exteriorizar y poner en marcha las ideas de los empleados.
Implicación y compromiso, talento interno, felicidad laboral
A la hora de implicar de forma activa a los empleados, se consiguen varios efectos, por una parte el empleado se siente valorado por la empresa, siente que es importante dentro de la empresa y que puede aportar sus ideas, generando así un mayor sentido de pertenencia y compromiso con la empresa. Por otra parte se ayuda a desarrollar el talento interno y por último, se genera mejor ambiente en la empresa y se consigue un mayor grado de felicidad laboral.
“Lanzar nuevos proyectos en la empresa estimula la motivación y el compromiso del trabajador”. Gonzalo Martín-Villa, Responsable de innovación de Telefónica (entrevista para ABC)
Una de las principales acciones a realizar para aumentar el compromiso y la motivación es explicar el sentido del trabajo que se realiza, tanto las tareas como el proceso. Cuando el empleado entiende el sentido y la importancia de su trabajo, se siente más importante dentro de la empresa y más seguro de su trabajo, por lo que su nivel de sentido de pertenencia, su compromiso y su motivación crecen, logrando una mayor implicación.
Un empleado comprometido puede ser hasta un 38% más productivo y las empresas con mayor nivel de compromiso presentan un 9% más de incremento en su cuenta de resultados.
Implicación para reducir costes
He podido comprobar los beneficios de la implicación de los empleados a la hora de buscar soluciones para ahorrar costes.
En plena época de crisis, la empresa en la que trabajaba propuso realizar un “saving plan”, es decir, un plan de ahorro de costes, por lo que pidió a los empleados que pensaran en fórmulas que permitieran reducir costes dentro de cada departamento. Los resultados fueron espectaculares, más de 1.000.000€, gracias a que muchos empleados se implicaron en el proyecto y aportaron diversas ideas, cada uno a diferente nivel y en la medida de las posibilidades de su puesto.
En mi caso, como disponía de importante presupuesto en mantenimiento, pude lograr un ahorro de unos 25.000€ (20% del presupuesto), gracias a la firma de un contrato de suministro. Posteriormente se realizó un nuevo contrato en el que se consiguió otro ahorro de un 25% del presupuesto, esta vez cambiando los consumibles por otros equivalentes y de la misma calidad. También se logró una estrecha colaboración entre los dos departamentos implicados en la elaboración del contrato, Compras y Mantenimiento.
Por otra parte, aparte de este proyecto concreto, tuve la ocasión de realizar un estudio de productos de otros proveedores, encargando varios análisis de compatibilidad de lubricantes y proponiendo cambios en los productos utilizados por otros de igual calidad aunque con un coste inferior. Tras los cambios realizados se consiguió un ahorro de unos 80.000€ (25% del presupuesto), además de conseguir mejorar las prestaciones gracias a estos nuevos productos.
Aprovechar el talento de las personas
La mejor persona que conoce cómo desarrollar una tarea es aquella que la realiza, es decir, las empresas deben de escuchar a sus especialistas, a las personas que están realizando directamente los trabajos. Los procesos de trabajo son procesos vivos, por lo que la mejora continua debe ser una filosofía de trabajo para poder mejorar y optimizar dichos procesos.
Por ejemplo, en un proceso industrial, quien mejor conoce el proceso productivo son las personas que están trabajando directamente en él y van a ser quienes puedan ofrecer propuestas de mejora o de innovación en los procesos. Esa aportación de ideas puede producir mejoras en los procesos, disminución de costes y mejoras de tiempos.
De igual forma sucede con las personas que realizan el mantenimiento, son quienes pueden aportar nuevas soluciones y propuestas de mejora para optimizar las tareas y mejorar el control sobre el estado de los equipos. La aplicación de tecnología y la aportación de ideas ayuda a mejorar el mantenimiento, mejorando así la disponibilidad de los equipos y pudiendo aumentar la productividad.
Nuevas tecnologías: Big Data, IOT, Impresión 3D
Actualmente se están desarrollando nuevos conceptos y tecnologías que pueden ser incorporadas a las empresas del sector industrial, y es posible que haya empleados dentro de las propias empresas que, por curiosidad o ganas de actualizarse, estén preparados para utilizar esas nuevas tecnologías, así que seguramente que sean las personas adecuadas para liderar la implementación de nuevas soluciones.
Transformación digital
De igual forma sucede con el concepto de transformación digital, es seguro que existen personas dentro de las empresas que estén mucho más actualizados y con una mentalidad mucho más abierta para adoptar este nuevo concepto en las empresas, por tanto pueden ser ellos quienes lideren y muestren el camino a sus compañeros, facilitando el proceso en la empresa.
En definitiva, la figura del intraemprendedor puede aportar a la empresa un aumento de la rentabilidad, una actualización tecnológica que implicará crecimiento de la empresa, manteniéndola en vanguardia y ayudando a diferenciarse en el mercado. Una empresa que se diferencia en el mercado resulta interesante y atrae al talento.
“Allí donde hay una empresa de éxito alguien tomó alguna vez una decisión valiente”. Peter Drucker
Y tú qué opinas:
- ¿Conocías la figura del intraemprendedor?
- ¿Crees que es útil en el sector industrial?
- ¿Existe la figura del intraemprendedor en tu empresa?
Te invito a compartir tu opinión y sugerencias en los comentarios.
Angel Partida
Ingeniero Técnico Industrial
Fundador de “Mantenimiento & Mentoring Industrial”
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Invertimos en el mantenimiento de máquinas, ¿y en el de las personas?
Invertimos en el mantenimiento de la maquinaria que utilizamos en nuestro proceso productivo, pero ¿invertimos en el mantenimiento de las personas que manejan esa maquinaria? ¿Acaso las personas no necesitan de un mantenimiento adecuado para mantener su nivel de compromiso y de eficacia, para realizar el trabajo de forma óptima?
“Una empresa no puede prosperar si no tiene a sus empleados detrás”. Neville Isdell
Toda empresa tiene dos activos fundamentales, empleados y clientes, sin ellos la empresa no tiene sentido. Por tanto, si los empleados son fundamentales en el éxito de una empresa, ¿por qué no se invierte lo necesario para mantener el capital humano de la empresa en las mejores condiciones?
Si no cuidamos el potencial humano de nuestra empresa, manteniéndolo en óptimas condiciones, no podremos conseguir un crecimiento sostenible de la empresa.
Si realizamos un paralelismo entre el mantenimiento de maquinaria y el que podemos aplicar a las personas, veremos los distintos tipos de mantenimiento que podemos realizar o tener en cuenta.
Correctivo.
En este caso actuamos de forma reactiva, es decir, solo actuamos cuando el empleado no se siente a gusto y manifiesta su malestar. En muchas ocasiones esta situación se vuelve irreversible, y podemos perder el potencial que tiene esa persona, bien porque abandona la empresa o bien porque cambia su actitud, decayendo su nivel su compromiso. En este caso corremos el riesgo de llegar demasiado tarde a solucionar el problema, teniendo unas consecuencias nefastas y un coste económico muy elevado.
Preventivo.
Realizamos tareas rutinarias a lo largo del tiempo para mantener el nivel de satisfacción del empleado. Podría considerarse como un ejemplo el uso de pagas extraordinarias o beneficios sociales como vales de comida, seguros médicos, planes de jubilación,…
En este caso intentamos cubrir las necesidades de satisfacción básicas, evitando así los casos de insatisfacción laboral más comunes.
Predictivo.
En esta clase de mantenimiento podemos realizar una serie de tareas para evaluar el estado de los empleados, como por ejemplo evaluaciones de desempeño, encuestas de satisfacción,…
Con estas medidas pretendemos verificar el estado de satisfacción del empleado, pudiendo así anticiparnos a una posible crisis, puesto que podemos detectarlas a tiempo.
TPM.
En este tipo de mantenimiento queremos involucrar al empleado, tanto en el diseño como en la realización de las tareas que van a ayudar a mantener su estado de satisfacción y de compromiso en unos niveles óptimos.
Nuestra intención es que el empleado sienta que es una parte muy importante dentro de la empresa y, por tanto, le invitamos a aportar sus ideas. Podemos utilizar buzones de sugerencias, grupos de trabajo, etc, para que el empleado pueda exponer su opinión y ofrecer propuestas.
Proactivo.
Nuestra intención es evitar situaciones recurrentes de crisis laboral, por tanto pretendemos atajar de raíz la causa de los conflictos, es decir, si tenemos algún problema recurrente no nos basta con resolver dicho conflicto, sino que buscamos poner remedio a la causa de ese problema recurrente, evitando de esa forma que pueda volver a suceder dicho conflicto.
RCM.
Con este tipo de mantenimiento pretendemos adecuar el mantenimiento para cada empleado. Es indudable que no a todas las personas les motivan las mismas cosas, por lo que realizaremos un estudio entre nuestros empleados, a fin de obtener las mejores medidas para mantener su estado de satisfacción.
¿Es necesario invertir y realizar tareas de mantenimiento en los empleados de nuestra empresa? Según mi punto de vista si, sin duda, sobre todo si lo que pretendemos es ser competitivos y disponer de una plantilla motivada, satisfecha y comprometida, posibilitando así el crecimiento sostenible de la empresa.
Ahora es tu turno,
- ¿Estás de acuerdo con esta clasificación? ¿Tienes alguna sugerencia?
- ¿Consideras que en tu empresa se realiza un mantenimiento adecuado a los empleados?
- ¿Crees que se podría tomar alguna medida para mantener o mejorar el nivel de satisfacción de los empleados? ¿Cuáles?
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Ingeniero Técnico Industrial
Fundador de “Mantenimiento & Mentoring Industrial”
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Resumen conferencia: Claves para la gestión de un sistema de mantenimiento
El pasado 6 de mayo participamos en la conferencia sobre mantenimiento en el Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Madrid.
La conferencia constaba de dos ponencias, Angel Partida expuso “Las 9 claves en la gestión de un sistema de mantenimiento“ y Jorge Asiain expuso “Sistemas avanzados de mantenimiento, TPM, LEAN y RCM“.
El objetivo de la conferencia es el de clarificar y desmitificar conceptos, así como realizar un cambio de visión en la forma de ver el mantenimiento.
La conferencia comenzó con una introducción en la que se definía como principal objetivo del mantenimiento evitar averías o anticiparse a ellas y planificar las intervenciones, es decir, queremos tener el control y no depender de los equipos, queremos decidir cuando realizamos las tareas necesarias de mantenimiento.
A la hora de implementar o mejorar un sistema de mantenimiento, tendremos que ver, en caso de no poder invertir, qué se puede hacer con los recursos disponibles, o ver qué podemos hacer si tenemos posibilidad de invertir. Para este segundo caso, se explicó un método que nos puede ayudar a la hora de justificar la inversión en mantenimiento ante la Dirección de la empresa.
Las 9 claves que considero esenciales a la hora de gestionar el mantenimiento son las siguientes:
1. Definición de objetivos.
El primer paso es saber qué queremos lograr y cómo lo vamos a conseguir, así como saber cuánto podemos invertir.
Por otra parte, es imprescindible contar con el compromiso a todos los niveles de la empresa para que el sistema de mantenimiento tenga éxito. También debemos tener en cuenta que hay que mantener el equilibrio P/CP.
2. Sistema de mantenimiento.
El segundo paso es definir el tipo de mantenimiento a implementar, para lo cual es aconsejable realizar un estudio de criticidad que nos ayude a determinar el tipo de mantenimiento adecuado para cada equipo. Hay que tener en cuenta que podemos utilizar técnicas y herramientas de predictivo a un coste muy asequible.
No podemos olvidarnos de la importancia de la lubricación y de la filtración, habitualmente infravaloradas en el mantenimiento, como herramientas de protección y que ayudan a mejorar el funcionamiento de los equipos.
3. Recursos.
Hay que analizar los recursos necesarios (herramientas, repuestos, documentación, codificación, …), que nos van a facilitar la realización de las tareas de mantenimiento, mejorando la calidad de las tareas y reduciendo tiempos de actuación.
También hay que tener en cuenta, si el personal necesario para realizar el mantenimiento ha de ser de la propia empresa o si puede ser aconsejable contratar servicios especializados.
No vale simplemente disponer de los recursos adecuados sino que hay que saber cómo utilizarlos adecuadamente.
4. Formación.
Imprescindible para saber cómo realizar las tareas, cómo utilizar las herramientas necesarias y cómo tener en cuenta los procedimientos de seguridad. También es necesaria a la hora de mantenernos actualizados como profesionales.
Y tan importante es la formación como la información, es decir, además de explicar qué hay que hacer y cómo se tiene que hacer, hay que dotar de sentido al trabajo que vamos a realizar explicando por qué y para qué se hace, generando de esta forma un mayor nivel de confianza y compromiso.
5. Seguridad, Calidad y Medio Ambiente.
No vale con declarar la seguridad como prioridad a la hora de realizar cualquier tarea, hay que velar porque se cumpla. Por tanto se necesita una formación adecuada y una concienciación de la importancia de la seguridad y de las consecuencias por falta de seguridad. Y esto no puede ser por compromiso sino porque creemos firmemente en la seguridad como prioridad a la hora de realizar un trabajo.
Esa concienciación de la seguridad como prioridad nos va a ayudar a potenciar la confianza a la hora de realizar el trabajo y va a mejorar la calidad del trabajo.
No podemos olvidarnos de las revisiones, inspecciones y legalizaciones necesarias, que van a repercutir en los seguros contratados por la empresa y que puede suponer variaciones importantes de dinero, tanto a la hora de pagar los seguros como de la cuantía a percibir en caso de accidente.
Es recomendable utilizar procedimientos de trabajo, de forma que nos facilite la trazabilidad, repetitibilidad y optimización del proceso, es decir, utilizar un sistema de calidad aunque no sea imprescindible tener la certificación ISO 9001.
Si duda vamos a generar residuos en nuestro proceso, por lo que deberemos identificar los diferentes tipos de residuos, fijar una ubicación para depositarlos y ver cómo se van a gestionar, sin olvidarnos de informar al personal relacionado con el proceso, para evitar almacenamientos indebidos en zonas no habilitadas.
No podemos olvidarnos de la gestión energética, primero deberemos realizar un control y seguimiento de los puntos de máximo consumo, para evitar sobreconsumos, para posteriormente estudiar la posibilidad de sustituir equipos buscando una mayor eficiencia energética.
6. Comunicación.
Necesitamos potenciar la comunicación tanto a nivel interno como a nivel externo.
A nivel interno, ¿conozco la importancia del trabajo que hacen otros departamentos? La comunicación nos va a facilitar la colaboración entre departamentos, mejorando la planificación y coordinación de tareas, y también va a incidir de forma positiva en el clima laboral.
A nivel externo, ¿escuchamos adecuadamente a nuestros clientes y proveedores? Queremos mejorar la experiencia de ambos con nuestra empresa, incrementando los niveles de satisfacción y confianza.
7. Gestión de Compras, Contratos y Proveedores.
Establecer procedimientos de compras sin perder flexibilidad, así como establecer contratos o acuerdos con los proveedores, que nos ayuden a mejorar las condiciones existentes y que nos permitan reducir costes.
Desde mi punto de vista es aconsejable cambiar la relación con nuestros proveedores, pasando de una relación comercial a una relación de socio estratégico y generar relaciones ganar-ganar.
8. Software de gestión de mantenimiento. GMAO.
No solo es importante documentar los datos relacionados con el mantenimiento (tareas programadas, averías, acciones realizadas, recursos utilizados, incidencias, datos técnicos, mediciones, tendencias, …), sino que es imprescindible utilizar esos datos y analizarlos para extraer todo su valor, de forma que nos ayude a tomar decisiones y mejorar los procesos.
Muchas veces he escuchado el comentario “tenemos gran cantidad de datos pero no tenemos tiempo para analizarlos“. Los datos no nos sirven de nada si no los analizamos y extraemos todo su valor.
Un software de gestión (GMAO) nos va a facilitar ese análisis, nos va a posibilitar utilizar esos datos con agilidad, nos va a facilitar la toma de decisiones y nos va a dar tiempo, tiempo que representa dinero.
9. Seguimiento y mejora continua.
Para que un sistema de mantenimiento sea eficaz, ha de mantenerse vivo y en continua evolución, por lo que es imprescindible definir KPI’s que nos ayuden a evaluar nuestro sistema y facilitar el seguimiento que nos permita realizar mejoras.
En definitiva, gestionando un sistema de mantenimiento de forma eficiente, podemos lograr grandes ahorros tanto en tiempo como en costes.
Es preciso gestionar el cambio, de forma que no se vea como una amenaza sino como una oportunidad, por lo que es necesario analizar todas las posibilidades que nos puede ofrecer nuestro sistema y no quedarnos con las primeras apreciaciones (gasto, carga de trabajo,…), es decir, debemos fijar objetivos a medio plazo y no quedarnos en el corto plazo.
Ahora es tu turno, ¿consideras que se tienen en cuenta estos 9 puntos a la hora de gestionar el mantenimiento en tu empresa? ¿Qué opinas de estos puntos? ¿Crees que se podría incluir algún punto más?
Te invito a compartir tu experiencia o tus sugerencias en los comentarios.
Ingeniero Técnico Industrial
Fundador de “Mantenimiento & Mentoring Industrial”
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Formación, ¿ventaja o inconveniente para las empresas?
Hace unos días leí un debate en el blog del IEBS en el que se preguntaba si las empresas invierten en formación. Este debate tenía como origen el último barómetro IFAES publicado, en el que se indicaba que el 75% de las compañías no invierte en formación. Una estadística realmente demoledora, aunque me pregunto si el 25% restante de las empresas invierte en formación realmente útil.
Según mi experiencia, en muchas ocasiones la empresas invierten en formación por compromiso, sin creer demasiado en el valor real de la formación.
Las conclusiones que se obtienen del debate son las siguientes:
- Los empleados tienen la sensación de que las empresas no invierten lo suficiente en la formación.
- La formación ofrece ventajas a empleados y empresas.
La impresión generalizada del debate, con la que coincido, es:
- las empresas ven la formación como un gasto y no como una inversión,
- hay prisa por conseguir resultados,
- no se ven garantías de obtener resultados positivos,
- existe temor a invertir en la formación del empleado por miedo a que se vaya y se pierda la inversión.
¿Es realmente útil la formación?
Desde mi punto de vista es fundamental para la mejora del rendimiento y el desarrollo de los empleados, lo que repercute directamente en el desarrollo de la empresa. Los empleados actualizan conocimientos, amplían aptitudes y adquieren nuevas competencias.
También influye en la imagen de la propia empresa, puesto que los empleados tendrán en mejor consideración la empresa y eso repercute en la imagen externa.
En un artículo anterior comentaba la importancia de la formación a la hora de generar compromiso en el empleado y como, según estudios, un empleado comprometido puede ser un 38% más productivo, lo que provoca un incremento de un 9% en los resultados de la empresa.
Desde mi punto de vista, el desarrollo humano es prioritario y apostar por la formación es invertir en el desarrollo del talento de los empleados, lo que supone invertir en el crecimiento de la empresa.
“Una organización depende del impulso de cada uno de sus miembros”.
Angel Partida
Ingeniero Técnico Industrial
Fundador de “Mantenimiento & Mentoring Industrial”
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